14 de noviembre de 2019

Queridos monstruos

  

    El ejemplo patético de Frankenstein, abatido por la soledad y la frustración, nos hizo pensar en nuestros Queridos monstruos. Y así titulamos la exposición de trabajos  presentados con ocasión del Tiempo entre libros. Entre los textos recibidos ha destacado la composición que Marcos Cabrera Antolín dedica a un Troll nada monstruoso. No te será difícil saber por qué cuando la leas. Esta ilustración que acompañaba el texto era parte del atractivo.